Desde el 26 de junio
Sofía Bernasconi llega a BAJ Biobío con su videoinstalación performática
Por Nicolás Martínez Ramírez
espectaculos@elsur.cl
Cuerpo, paisaje y máquina. Sofía Bernasconi ha hecho del performance y la videoinstalación sus grandes formas de expresión.
Es así que “Híbrida: cuerpos y tecnologías en el icosaedro”, una videoinstalación performática, llegará hasta la Galería de Balmaceda Arte Joven Biobío (Colo Colo 1855, Concepción).
La muestra, que abrirá el 26 de junio a las 18.30 horas, propone una exploración interactiva en torno al cruce entre cuerpo, paisaje, tecnología, imagen en movimiento, programación interactiva, diseño sonoro, la arquitectura y la ingeniería mecánica.
A través de un recorrido interactivo, el público es invitado a activar imágenes, sonidos y movimientos, generando un espacio de juego y experimentación donde cada visita transforma la obra.
Según señala la artista, “Híbrida” surgió en 2022 como una primera versión, digamos así que fallida. “Una videoinstalación donde performaban plástico y envuelve en locaciones específicas vinculadas a sitios hidrográficos de Concepción”.
“Ha sido un proceso súper largo, después de esa primera videoinstalación con esa performance de plásticos, trabajé en un guión de obra que tardé un año en desarrollar y recién ahora lo estoy montando”, precisó.
Un hito que, según puntualiza la propia artista, marca un proceso de desarrollo personal de larga data. “Yo llevo varios años investigando cómo se mueven los cuerpos de actores o bailarines para mis investigaciones y llegó un punto en que me cuestioné si podía simplemente disponer mi propio cuerpo sin necesitar a disposición un propio cuerpo”, puntualizó.
Son tres cuerpos, son, particularmente, una de las áreas de interés de la también titulada en Producción Musical UCdeC, siempre con la idea de ahondar más y vincular los usos de la tecnología.
“Yo no quería limitar y premiar pensar los cuerpos anclados en la tecnología y en formas tan estereotipadas que se ven en el mundo de la danza, del arte y de las artes escénicas”, afirmó.
La puesta en escena está compuesta por tres piezas interconectadas: “Mecánica del Tacto”, “Tacto” y “Orilla”.
En “Mecánica del Tacto”, la performance vuelve háptica y sonora un cuerpo plástico en contacto con el agua e incluye al contacto del público, activación del paisaje acústico formado por registros, grabaciones de campo y texturas digitales.
Finalmente, “Orilla” introduce un brazo robótico que repite gestos inspirados en el movimiento humano, en una coreografía que tensiona las fronteras entre cuerpo vivo y máquina.
“Siempre fue pensado así, una de las cosas que le cruza es que demarcó la performance en los sitios que fueron ubicados en sitios específicos que fueron en la Laguna Grande, el río Biobío y el humedal Vasco Da Gama. Es la triangulación que se genera en el mapa, esos tres puntos son los que se abordan”, explicó.
Precisamente, esos tres espacios públicos son los que conforman las videoperformances de la obra.
“Llevó mucho tiempo ensayando y trabajando mi propio cuerpo, me costó pensar que existe un gran espacio para la creatividad y la libertad humana en pensar en nuestros cuerpos expandidos en la tecnología”, comentó.
“En existencia tecnológica, quiero pensar que existe un gran espacio para la creatividad y libertad humana en pensar en nuestros cuerpos expandidos en la tecnología”
Sofía Bernasconi, artista y creadora de “Híbrida”